La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha lanzado un contrato pionero para detectar mediante algoritmos de inteligencia artificial (IA) posibles prácticas fraudulentas en licitaciones públicas. Así lo ha adelantado elDiario.es. En concreto, Competencia ha sacado a concurso un contrato de “servicios para el desarrollo y mantenimiento de aplicaciones de Inteligencia Artificial e Inteligencia de Negocio”. Este, licitado por procedimiento abierto y con un período inicial de 24 meses, está valorado en aproximadamente 2,6 millones de euros.
Entre los sistemas de información de la CNMC que se van a desarrollar y mantener con este servicio cabe destacar en primer lugar el sistema BRAVA, acrónimo del inglés Bid Rigging Algorithm for Vigilance in Antitrust (Algoritmo de Manipulación de Licitaciones para la Vigilancia Antimonopolio). Se trata de un desarrollo propio de la CNMC que, mediante herramientas de IA y técnicas estadísticas, ayuda al organismo a detectar de oficio prácticas anticompetitivas en licitaciones públicas.
Competencia saca pecho
BRAVA fue creado por la Unidad de Inteligencia Económica (UIE) de la CNMC con el apoyo de la subdirección de Informática, tras una prueba de concepto previa realizada por una empresa externa. La criticidad de este desarrollo radica en su algoritmo basado en el aprendizaje automático (machine learning), que toma como fuente de información la base de datos de contratación pública.